Escribir es un acto poderoso que necesita tiempo y compromiso por parte del autor o autora, pero también puede ser muy solitario. Quien se embarca en un proyecto largo —una novela, un ensayo, un libro de cuentos o un manual de autoayuda— suele enfrentarse a momentos de bloqueo, dudas sobre la estructura o inseguridad respecto a la trama, un personaje o incluso su propio estilo.
Aquí es donde aparece el acompañamiento a autores, un servicio cada vez más valorado por escritores de narrativa o textos académicos.
¿Por qué es recomendable?
Es posible que uno de tus personajes haya cambiado de nombre en mitad de la novela y no lo hayas notado. O que describas una escena con un personaje que en el capítulo anterior estaba ubicado en otro lugar. Quizá tu historia tiene varios personajes muy bien caracterizados, pero hablan exactamente igual a la hora de escribir una conversación entre ellos.
Con acompañamiento, el proceso de escribir se convierte en una experiencia más ligera, más creativa y mucho más satisfactoria. La persona que te acompaña tiene la experiencia para identificar problemas en la historia o en la creación de un personaje. También puede mostrarte errores de continuidad u otros aspectos o cuestionarte sobre aspectos éticos o valores sociales.
¿Qué es exactamente?
No se trata de que alguien escriba por ti, sino de contar con un profesional que te ayude a:
- Definir la mejor forma de organizar tu obra.
- Mantener la coherencia en el tono y el estilo.
- Revisar avances periódicamente para darte retroalimentación.
- Evitar errores comunes que alargan o traban el proceso.
En cualquier caso, la historia pertenece a su creador o creadora. El criterio experto puede ser una gran ayuda para mejorar la expresividad de la obra, pero la decisión final siempre la tendrá el autor.
¿Por qué es útil?
- Reduce la sensación de aislamiento. Tener a alguien con experiencia editorial que lee y comenta tu texto genera motivación.
- Mejora el resultado final. Una mirada externa y experta detecta lo que a ti se te puede haber escapado.
- Te ayuda a avanzar. Cuando surgen bloqueos, el acompañante propone soluciones concretas. A veces, el simple hecho de charlar sobre la trama, el personaje, el conflicto… permite al autor encontrar por sí mismo una solución.
Ejemplo: un autor que inicia una autobiografía puede tener cientos de páginas dispersas con anécdotas familiares. El acompañamiento editorial le ayuda a dar forma narrativa, seleccionar lo más relevante y construir un hilo conductor que atrape al lector.
¿En qué momento de la obra debería tener acompañamiento?
Contrario a lo que pueda parecer, no recomiendo hacerlo desde el primer momento, ya que es necesario que tu obra tenga ya un recorrido para poder aprovechar al máximo los beneficios de un acompañamiento.
En mi caso, siempre he trabajado con obras ya “finalizadas” y, sí, las comillas muestran un poco de ironía. A fin de cuentas, todos los escritos tienen posibilidad de mejora con una revisión completa de la historia. Además de la corrección formal del texto (tildes, comas, repeticiones, sintaxis, pobreza léxica…), unos ojos nuevos y expertos son capaces de ver pequeños fallos en la trama que restan credibilidad a la historia.
Al final, el alcance del servicio depende de lo que desee el autor o autora. ¿Solo quiere una corrección ortotipográfica? ¿Espera algunos consejos para mejorar la expresividad narrativa? ¿O está abierto a reescribir algunas partes, acortar otras, incluir descripciones o convertir diálogos indirectos en diálogos directos, para potencia la expresividad? Eso es lo que debes definir antes de buscar este servicio.